La familia Pérez: El navegador

Roberto, Marta y Pepín se marchan el fin de semana con el coche a visitar por primera vez a unos amigos que se han ido a vivir a un pueblo pequeño de la Sierra madrileña.
 

Roberto: Marta, ¿pero tú sabes exactamente dónde está ese pueblo? ¿Cómo se llama?, que se me ha olvidado… tenía un nombre rarísimo.

Marta: "Ovejas de la Sierra", qué gracioso. Pero me ha dicho María que es un pueblecito muy bonito y pintoresco… Creo que allí viven unas diez familias.

Pepín: ¿Ovejas u orejas de la Sierra? Cualquiera de los dos molar mazo(ugs.) super seinmolan mazo… y a sus habitantes, cómo les llaman: ¿el ovejónRiesenschafovejones u el orejónRiesenohrorejones?

Marta: ¡Ay!, qué ocurrencias tienes, Pepín… Y son… O-ve-jas… No orejas, chaval… Y no tengo ni idea del el gentilicioEinwohnerbezeichnunggentilicio. Por cierto, Roberto, a ti Juan te mandó la dirección por email. Tendremos que usar el GPS para buscarla… no nos queda otra.  

Roberto: Sí, claro, es la primera vez que vamos. Pero te voy a pedir un favor, Martita: que conduzcas tú el coche, porque desde ayer tengo una la ciáticaIschias; Hexenschussciática que no puedo casi mover la pierna… ¿Y si anulamos la visita y vamos otro fin de semana?

Pepín: Sí, yo creo que es lo mejor, mamá. Además, yo no pinto nada(ugs.) ich hab‘ dort nichts zu sagenno pinto nada allí. Prefiero quedarme en casa estudiando…

Marta: A ver, chicos, no es una visita cualquiera, es la fiesta de inauguración de su nuevo hogar. Mandaron las invitaciones hace un mes para organizar el catering y el alojamiento, etcétera. Así que no les vamos a dejar colgados por una ciática, ¿verdad, cariño? Y tú, Pepín, ya estabas avisado; así que no me vengas con el cuento de que te quedas a estudiar, que que no cuela, majete(ugs.) damit kommst du nicht durch, Freundno cuela, majete.

Pepín: Bueno, hacer un sacrificioein Opfer bringenharé ese sacrificio aunque no me gusten las ovejas… Habrá chicas de mi edad…

Roberto: Claro, y si no le echar los tejos(ugs.) jdn. anmachenechas los tejos a alguna oveja chula… Venga, moveros ya porque si salimos más tarde nos encontraremos con los el domingueroSonntagsfahrerdomingueros…
 

Roberto, Marta y Pepín ya están de camino hacia el pueblo. Y para encontrarlo, Marta ha encendido el navegador GPS.

Marta: Mira que está complicado llegar (Voz: Ahora, gire a la derecha y en la rotonda salga por la segunda salida… y ahora salga por la segunda salida… y siga por la izquierda)... Mira que es cansino/anervtötendcansina la voz de este el navegadorNavigationssystemnavegador… (y siga por la izquierda, y siga por la izquierda…) ¿Te parece bonita la voz, Roberto?

Roberto: No está mal… es muy, es muy… clara. Marta, que no es por ahí, que nos vamos a Burgos…

Pepín: Mamá, por la izquierda, no por la derecha… Uff, vaya viaje en coche tan pesado… Oye, no puedo oír más a la tía esa del navegador, por favor, pon el volumen más bajo, querayarse(hier) durchdrehen me estoy rayando con tanta repetición…

Marta: Estoy hasta las narices de los dos, y del navegador, ni te cuento… Y ahora, qué… esto es un camino de ovejas… (gire a la derecha y habrá llegado a su destino, gire a la derecha y habrá llegado a su destino) Pues, adiós, Maricarmen… Y gracias por las indicaciones.

Roberto: Martita, ¡lo has conseguido! Ya veo el pueblo. Desde luego que hace honor a su nombre "Ovejas de la Sierra". Y ahora, a buscar la casa, pero eso parece más fácil... (risas)

Pepín: Anda, que venirse aquí a vivir, seguro que no tienen internet.… Eeeh, ovejas… dejadnos paso. Espera, para, para, mamá, que me voy a hacer un selfie con esta oveja, mira qué sonrisa tan molón/ona(ugs.) nettmolona.

Marta: A ti se te va la pinzadu fängst an zu spinnense te va la pinza, Pepín.